Planean viaje a Japón y Corea por trasplante hepático en niños

Avanzar en un programa de trasplante hepático para niños depende de la formación y para eso, los integrantes del equipo que opera en el Hospital Militar planea viajar a Japón y Corea del Sur, donde por razones religiosas tienen una alta frecuencia de procedimientos de "trasplante vivo".

El cirujano responsable del Programa Nacional de Trasplante Hepático que funciona desde 2009 en el Hospital Militar, Martín Harguindeguy, dijo a Ser Médico que el desafío para los próximos meses será avanzar en un programa que incluya también procedimientos para niños.

Hoy, esos procedimientos no se hacen en Uruguay. Pero para hacerlo, el equipo multidisciplinario que se ocupa de las intervenciones "debe formarse" entre otras cosas en la realización de trasplantes desde personas vivas. Para eso debe salir del país, señaló Harguindeguy.

"Desde el punto del crecimiento del programa, tenemos el desafío del trasplante vivo y pediátrico. Eso depende de nosotros, de la formación, hay que ir a lugares que hagan esto bien y con mucha frecuencia", dijo.

Añadió que "hay países que lo único que hacen son trasplantes vivos por razones religiosas y por eso han desarrollado el área de una manera extraordinaria". Como ejemplo, nombró a Japón y Corea del Sur.

"Pensamos irnos para allá", añadió. Según dijo, el equipo se plantea como posible el operar a un adulto sano si está en juego salvar a un niño, pero tiene dudas sobre la posibilidad de operar a un adulto para que le ofrezca un órgano a otro adulto.

"No en todos los lugares está bien visto o aceptado la donación adulto-adulto, porque estás operando a un sano. Es difícil, yo me lo he cuestionado. No así para niños, porque una madre o un padre que done un sector para su hijo es algo que se ve más viable. Por eso caminamos enfocados al trasplante pediátrico, para adultos hay que mirarlo con lupa", señaló el cirujano.

El Programa de Trasplante Hepático forma parte de la Universidad de la República, y allí funciona una Unidad Docente Asistencial, por lo que pasan por ahí estudiantes.

Desde 2009, el equipo realizó 82 trasplantes y con índices de calidad que ponen al programa al nivel de España, que a su vez tiene uno de los sistemas más exigentes, explicó el médico.

Harguindeguy dijo que existe una alta tasa de donación en el país y además, con la nueva ley aprobada por la que todas las personas son donantes a menos que manifiesten lo contrario, se espera que la tasa suba.

Al mismo tiempo, Uruguay tiene una muy baja tasa de pacientes que se mueren esperando en proceso de recibir un órgano.

Más información sobre Harindeguy y el trabajo del Programa de Trasplante Hepático, aquí.

 

 

lunes de 27 de enero de 2014