La utilización de grandes volúmenes de datos puede allanar el camino hacia un cuidado proactivo del paciente. Pero antes de llegar a los resultados, ¿cómo se puede aprovechar el poder de esa información?

En la actualidad, el centro médico estadounidense Dartmouth-Hitchcock trabaja con un sistema llamado ImagineCare, diseñado por Microsoft, para controlar a 6.000 pacientes mediante complejos algoritmos, estadísticas, Big Data e inteligencia artificial. 

ImagineCare se alimenta con los datos recopilados por sensores que lleva el paciente (para medir frecuencia cardíaca, presión arterial, patrones de sueño, peso, entre otros indicadores) y por sensores que se instalan en su hogar.

"Se le entrega un kit que contiene una balanza, una pulsera (en este caso, una Microsoft Band), un medidor de presión, entre otros dispositivos inteligentes", ilustró Rodrigo Astiazarán, gerente general de Microsoft Uruguay. 

Los sensores que lo rodean aprenden sus movimientos cotidianos para disparar alertas si un día se registra algo fuera de lo común. Por ejemplo, ante una caída o un comportamiento errático, el sistema podrá llamar al paciente o a un contacto de emergencia o al médico referente, según entienda cuál es el nivel de gravedad.

Los datos se transmiten directamente a la nube para que sean analizados en tiempo real por un equipo sanitario con la ayuda del asistente virtual Cortana.

El operador, por ejemplo, puede pedirle a Cortana que analice la evolución reciente del peso del paciente; si al hacerlo encuentra un elemento llamativo, lanzará una advertencia. 

Al mismo tiempo, los pacientes reciben recordatorios para tomar sus medicamentos o para realizar ejercicios. Si el médico le ordenó una meta diaria de 1.500 pasos y no la cumple, el rastreador de actividad que lleva en la muñeca lo dejará en evidencia. 

Pero ImagineCare no es solo acerca de la salud física del paciente. Cortana también cuenta con capacidades de percepción que permiten detectar su estado emocional. El sistema analiza su tono de voz durante las interacciones con los enfermeros y lo que escribe en redes sociales. Estas características apuntan a descubrir síntomas tempranos de una depresión.

El sistema está diseñado, además, para evolucionar: puede aprender sobre las personas de una misma edad y con enfermedades similares, por ejemplo, para ser más eficiente en su respuesta sanitaria conforme pasa el tiempo. ¿Qué es Big Data?

Se trata de un conjunto de herramientas que se sirve de complejos algoritmos y estadística, incorporado en software de análisis de datos.

¿Es algo nuevo?

Cuando empresas como Amazon recomiendan qué libro leer, lo que hay detrás del proceso es Big Data. Las compañías aplican algoritmos cuando combinan datos como los gustos de un usuario al que conoce por adquisiciones anteriores u otros que lo identifican como sus visitas a determinadas páginas web. ¿A quién beneficia?

Es aplicable a la analítica sanitaria, a la predicción de enfermedades, al mantenimiento de instalaciones de energía, al conocimiento de tendencias de compra y a un largo etcétera.