Silvariño: la Facultad es un lugar “privilegiado” porque practica “medicina de equipo”


El médico es internista y trabaja como docente del Departamento de Emergencia y del Centro de Nefrología del Hospital de Clínicas, además de desempeñarse en un centro privado.

"Tenemos la capacidad de trabajar en equipo. En general no en todos los sitios sucede eso. Cuando es un politraumatizado, por ejemplo, la valoración muchas veces la hace el médico y va citando a diferentes especialidades en función de lo que va viendo. Acá la posibilidad de trabajar en equipo es muy buena para el paciente y para todo el equipo", señaló sobre la puerta de emergencia del Clínicas.

El médico opinó que ese es un aspecto en el qué "más fuertemente hay que trabajar" en todo el sistema de atención, para fortalecerlo. 

"Tenemos que trabajar pensando en que a nuestros pacientes les vaya mejor, para eso hay que hacer realmente una medicina de grupo, de equipo. En los hechos prácticos es una cosa que se dice pero que cuesta concretar. La Universidad es un ámbito privilegiado pero es una medicina que no resulta costo-efectiva para los sistemas", explicó.

En particular en el área de Emergencia, Silvariño contó que la situación "ha ido cambiando" y que "en general el sistema no está del todo preparado para atender a toda la demanda que hay", sobre todo a partir de la cantidad de politraumatizados en el tránsito. Más allá de eso, puntualizó que progresivamente la atención "se ha ido adaptando".

Diferente es el trabajo en el Centro de Nefrología, que funciona con tres Institutos de Medicina Altamente Especializados (IMAE) en hemodiálisis, diálisis peritoneal y trasplante.

Silvariño explicó que esa es una de las "fortalezas" del centro, que pese a no estar exento de "los problemas" de funcionamiento del hospital, trabaja con financiación externa.

El centro tiene un amplio desarrollo en temas de calidad, protocolos y guías clínicas. "Hay mucha gente formada en temas de calidad, se han creado guías y protocolos de todo, (incluso) de la calidad del agua de la hemodiálisis", contó.

Eso permite  tener datos sobre la cantidad de casos nacionales que se tiene, prevalencias, qué patologías llevaron a los pacientes a repetir tratamiento, entre otras estadísticas de utilidad.

"Más allá de sus problemas, la Universidad es lo que me ha dado más satisfacciones. La docencia me anima a seguir vinculado a la Facultad y creo que es un aspecto muy importante de la vida médica. Ha sido un estímulo permanente para formarme y mejorar", concluyó Silvariño.

miércoles de 01 de octubre de 2014